Buenas noches, me llamo Yolanda, tengo 25 años y estoy soltera. Mónica me ha animado a contar mis experiencias personales para mayor diversidad en su blog y gustosamente lo haré. Me describiría a mi misma como una persona extrovertida, simpática, cariñosa, algo cabezona, un poco desmotivada por mi físico y sobretodo soñadora. Que no os engañe mi personalidad porque tras de mi arrastro un gran problema, me ilusiono con facilidad.
El problema es que pienso que cada chico puede ser el definitivo y ansiosa de ganas de tener algo estable me lanzo sin miedo. Seguramente mi inseguridad hace que a la mínima muestra de interés me vuelque de manera brutal en esa persona. Esto ocasiona que el sexo contrario se asuste y me devuelva a la realidad, en la que cómo no me encuentro sola. Doy demasiado de mi misma sin recibir apenas nada a cambio y me engaño en citas que llegan a ser mediocres. Mis ilusiones se desvanecen y me van quebrando poco a poco. Espero tanto y nada...
Y yo os pregunto lectores ¿Es esto desesperación o falta de cariño? ¿ por qué nos ilusionamos tan pronto? ¿es bueno ser tan lanzados? ¿ qué pasa si sólo vivimos de ilusiones?
Mi consejo es que conozcamos primero a esa persona pero poco a poco, yo no soy quién para decir si será el chico o chica definitivo/a pero todo es intentarlo. Tener ilusiones es bueno, pero en su justa medida, no podemos darlo todo por cualquier persona que nos haga sentir bien, así que antes de lanzarnos debemos preguntarnos ¿qué queremos? ¿realmente esa persona vale la pena? No nos mintamos a nosotros mismos y seamos realistas conforme a nuestros sentimientos y necesidades.
No os conforméis por el miedo a estar solos, al fin y al cabo peces en el mar hay muchos.
Hasta la próxima
La Srta Evans